Por Carlos Mellado G
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El tiempo es uno de los recursos más escasos hoy en día. Aunque la tecnología nos ha facilitado la vida en muchas maneras, en ciertas otras formas también nos ha esclavizado a ella – consideremos por ejemplo al Smartphone al que vemos más de 150 veces al día –.
Después de todo no suena tan justo, ¿no? Entregar parte de nuestro escaso tiempo a una pantalla donde dejamos minutos de nuestra vida no es lo ideal, Dunkin’ Donuts lo sabe y quiso cambiar esto haciendo uso – paradójicamente – de la pantalla del Smartphone. Porque aunque estemos en constante movimiento, no importa a donde vayamos, siempre estaremos conectados a través de nuestros teléfonos.
Lo ´mobile’ se ha vuelto parte de nosotros y empresas como Dunkin’ Donuts lo saben. Su VP Global de Customer engagement, Scott Hudler, comentó que ellos buscan “estar siempre en movimiento”. En esta nueva era las marcas que se queden estáticas morirán sin importar su tamaño – piensa en cómo Blackberry se aferró a su teclado físico hasta que fue demasiado tarde –.
¿Qué hizo Dunkin’ Donuts?
A través de la campaña “Time to coffee”, la marca demuestra mantener coherencia entre lo que dice y lo que hace. En base a los hábitos de consumo de sus clientes en Nueva York y al valor que el tiempo tiene en sus vidas, agregó información valiosa a los resultados de búsqueda de Google. Ahora, cuando las personas buscaban ‘Café cerca de mí’ en Google, Dunkin’ Donuts ofrecía – como resultado promocionado – una web que mostraba en un mapa la ubicación, distancia, ruta, tiempo de llegada y tiempo de espera para atención por cada local. Un gran dato, ¿no crees?
Como te comenté en mi artículo sobre la campaña ‘Share a Coke’ de Coca Cola, tenemos que ver oportunidades donde otros no las ven. En esta ocasión Dunkin’ Donuts vio la oportunidad de entregar un beneficio (información sobre el tiempo de espera para atención), para mejorar la experiencia de las personas con la marca.
Nuevamente, se trató de un detalle que estuvo disponible y a la vista de cualquier otra empresa en el mercado, pero que solo una marca con un verdadero enfoque en las personas pudo observar: Tiempo.
No siempre se trata de recibir por parte de nuestros clientes, sino también de dar. Retribuir la preferencia de las personas con preocupación hacia ellas, no solo por generar más ventas, sino para mejorar los momentos de relación con nuestra marca. Ese debe ser el propósito de toda marca.
¿Las ventas? Nadie puede (ni debe) negar la importancia de vender (un producto, servicio o idea), pero tampoco nadie puede negar que las ventas dependen cada vez más del valor agregado que del producto en sí mismo (p.e. Starbucks).